A exactamente un año de las elecciones presidenciales de Colombia, programadas para el 31 de mayo de 2026, las encuestas comienzan a dibujar un panorama electoral marcado por la fragmentación, la polarización y un alto porcentaje de indecisos. Los sondeos más recientes revelan tendencias significativas que podrían definir la contienda electoral, aunque el escenario sigue abierto y con múltiples variables en juego.
“Estamos ante un panorama electoral extremadamente fluido, donde ningún candidato logra superar el 12% de intención de voto y donde el voto en blanco y la indecisión siguen siendo las opciones mayoritarias”, explica Patricia González, directora del Observatorio Electoral de la Universidad Nacional. “Esto refleja tanto el desgaste de la política tradicional como la dificultad de los nuevos liderazgos para conectar con un electorado cada vez más escéptico”.
Un análisis detallado de las últimas encuestas realizadas por firmas como Invamer, Guarumo y Centro Nacional de Consultoría (CNC) revela patrones que permiten entender hacia dónde se dirige la contienda electoral y qué factores podrían resultar decisivos en los próximos meses.
El ascenso de Bolívar y la reconfiguración de la Izquierda.
El dato más relevante de los últimos sondeos es el consistente ascenso de Gustavo Bolívar, quien ha pasado de tener una intención de voto del 8,5% en enero a un 11,7% en mayo, según el promedio ponderado elaborado por La Silla Vacía con base en ocho encuestas diferentes. Este crecimiento sostenido lo posiciona como el candidato mejor ubicado actualmente, superando por primera vez a figuras como Vicky Dávila y Sergio Fajardo.
“El ascenso de Bolívar responde a varios factores”, explica Carlos Lemoine, presidente de la encuestadora CNC. “Por un lado, su visibilidad como director del Departamento de Prosperidad Social le permitió mantener presencia en los territorios; por otro, su perfil radical lo diferencia claramente en un escenario donde muchos candidatos buscan el centro”.
La reciente renuncia de Bolívar a su cargo en el DPS, anunciada el 15 de mayo, marca el inicio formal de su campaña presidencial. Sin embargo, su candidatura enfrenta desafíos significativos dentro del propio Pacto Histórico, donde el presidente Petro ha mostrado preferencia por otros perfiles menos polarizantes.
Según fuentes cercanas al gobierno consultadas por El Tiempo, el presidente considera que “Bolívar podría ganar fácilmente una consulta interna, pero tendría dificultades para ampliar su base electoral en una segunda vuelta”. Esta percepción ha generado tensiones dentro del oficialismo, que aún no define su mecanismo para elegir candidato.
Otros posibles candidatos de izquierda, como Daniel Quintero (4,2%) y María José Pizarro (3,8%), se mantienen en posiciones secundarias sin mostrar crecimiento significativo en los últimos meses.
Estancamiento en el Centro y la Derecha.
Mientras Bolívar muestra una tendencia ascendente, las figuras que lideraban las encuestas a finales de 2024 parecen haber alcanzado un techo. Vicky Dávila, quien llegó a tener una intención de voto del 13,7% en febrero, ha descendido al 11,3% en mayo. Sergio Fajardo, que lideraba con un 13,7% en diciembre, ahora se ubica en el tercer lugar con un 11,1%.
“Tanto Dávila como Fajardo enfrentan el desafío de renovar su narrativa”, señala Juan Carlos Rodríguez, analista político y columnista. “Dávila ha invertido fuertemente en redes sociales y giras regionales, pero su perfil mediático genera tanto rechazo como apoyo. Fajardo, por su parte, arrastra el desgaste de dos campañas anteriores y la percepción de indecisión que lo ha caracterizado”.
La derecha, representada principalmente por el Centro Democrático, muestra dificultades para posicionar a sus candidatos. María Fernanda Cabal y Miguel Uribe comparten un 4,4% de intención de voto, muy lejos de los números que el partido obtuvo en elecciones anteriores con Iván Duque o el propio Álvaro Uribe.
“El Centro Democrático enfrenta una crisis de liderazgo y renovación”, explica Rodríguez. “Ni Cabal ni Uribe han logrado trascender la base tradicional del partido, y la ausencia de Álvaro Uribe como candidato deja un vacío difícil de llenar”.
El Factor Vargas Lleras.
Un dato relevante de las últimas encuestas es el crecimiento sostenido de Germán Vargas Lleras, quien ha pasado del margen de error a un sólido 6% de intención de voto. El exvicepresidente, que aún no ha oficializado su candidatura, ha incrementado su presencia en redes sociales y medios, invirtiendo más de 80 millones de pesos solo en plataformas como Facebook e Instagram.
“Vargas Lleras representa una opción de centro-derecha con experiencia gubernamental y estructura política territorial”, explica González. “Su crecimiento refleja la búsqueda de un perfil técnico y experimentado por parte de un sector del electorado que no se identifica con los extremos”.
Sin embargo, la candidatura de Vargas enfrenta la incertidumbre sobre su estado de salud. Según reportes recientes de El Colombiano, el exvicepresidente será sometido a una nueva intervención quirúrgica en Estados Unidos, lo que podría afectar su calendario de precampaña.
La caída de Claudia López y el reto del Centro Político.
Otro movimiento significativo en las encuestas es el descenso constante de Claudia López, quien ha pasado de un 10,6% en noviembre de 2024 a un 5,6% en mayo de 2025. La exalcaldesa de Bogotá, que aún no ha oficializado su candidatura, ha sido blanco de críticas desde diversos sectores políticos.
“López enfrenta el desgaste natural de su gestión como alcaldesa y la dificultad de definir un perfil claro en el espectro político”, señala Rodríguez. “Sus cambios de posición en temas clave y su enfrentamiento con diversos sectores han afectado su imagen de coherencia”.
El centro político, que fue determinante en elecciones anteriores, muestra una fragmentación significativa. Además de Fajardo y López, figuras como Juan Manuel Galán (3,5%), Carlos Amaya (2,8%) y Alejandro Gaviria (2,7%) compiten por un espacio similar, dividiendo un electorado que podría ser decisivo en una segunda vuelta.
Cronología de movimientos electorales: Abril-Mayo 2025
Los últimos dos meses han sido particularmente intensos en términos de posicionamiento electoral:
- 15 de abril de 2025: Gustavo Bolívar anuncia su intención de renunciar al DPS para lanzar su candidatura presidencial.
- 28 de abril de 2025: Se publica la encuesta de Guarumo que muestra un “empate técnico” entre Bolívar, Dávila y Fajardo.
- 2 de mayo de 2025: Vicky Dávila inicia una gira por la región Caribe, enfocándose en temas de seguridad y anticorrupción.
- 8 de mayo de 2025: El Centro Democrático anuncia que definirá su candidato único mediante una consulta interna en octubre.
- 15 de mayo de 2025: Bolívar formaliza su renuncia al DPS y critica duramente la gestión económica del gobierno del que formó parte.
- 18 de mayo de 2025: Sergio Fajardo presenta su “Acuerdo Nacional por la Educación” como eje de su propuesta programática.
- 20 de mayo de 2025: Se conoce que Germán Vargas Lleras será operado nuevamente, generando incertidumbre sobre su candidatura.
Análisis por regiones: Un país electoralmente fragmentado
Las encuestas también revelan diferencias significativas en las preferencias electorales según las regiones del país:
Región Caribe.
En la costa atlántica, tradicionalmente liberal, Gustavo Bolívar muestra un crecimiento importante, alcanzando un 14,2% según la última encuesta de Guarumo. Sin embargo, la reciente confrontación del presidente Petro con senadores costeños por el rechazo a la consulta popular podría afectar esta tendencia.
“El Caribe es una región pragmática que suele alinearse con el gobierno de turno”, explica Yann Basset, experto en geografía electoral. “Pero también valora su autonomía política y reacciona cuando se siente atacada, como ocurrió con las declaraciones de Petro contra los senadores de la región”.
Región Andina.
En el centro del país, Vicky Dávila mantiene su fortaleza, especialmente en Bogotá (13,5%) y Antioquia (12,8%). Sergio Fajardo también muestra buenos números en esta región, particularmente en Medellín, donde alcanza un 15,3% de intención de voto.
Región Pacífica.
El Pacífico muestra una clara preferencia por candidatos de izquierda. Bolívar lidera con un 16,7%, seguido por Francia Márquez, quien a pesar de no haber oficializado su candidatura, obtiene un 9,2% de intención de voto en esta región.
Región Oriental.
En los departamentos del oriente colombiano, Vargas Lleras muestra su mayor fortaleza, con un 8,5% de intención de voto, seguido por Miguel Uribe con un 6,3%.
El factor decisivo: Indecisos y voto en vlanco.
Quizás el dato más revelador de las encuestas es que, a un año de las elecciones, la suma del voto en blanco y los indecisos alcanza un 15,6%, superando a cualquier candidato individual. Esta cifra, que se ha mantenido estable en los últimos meses, refleja el descontento con la oferta política actual.
“El alto porcentaje de indecisos representa tanto un desafío como una oportunidad para los candidatos”, explica González. “Quien logre conectar con este electorado escéptico podría cambiar radicalmente el panorama electoral en los próximos meses”.
Según un análisis cualitativo realizado por la firma Cifras & Conceptos, los indecisos se concentran principalmente en tres grupos: jóvenes urbanos educados, clase media afectada por la situación económica, y votantes rurales desconectados de la política nacional.
Perspectivas: ¿Qué esperar en los próximos meses?
A un año de las elecciones, varios factores podrían alterar significativamente el panorama electoral:
- Definición de candidaturas oficiales: Muchos de los nombres que aparecen en las encuestas aún no han oficializado su candidatura. Las decisiones de figuras como Claudia López, Germán Vargas Lleras o Francia Márquez podrían reconfigurar el escenario.
- Consultas y alianzas: Los mecanismos para definir candidatos únicos en cada sector político serán determinantes. El Pacto Histórico ha anunciado que iniciará su proceso interno en julio, mientras que el Centro Democrático lo hará en octubre.
- El factor económico: La percepción sobre la situación económica del país será crucial. Según la última encuesta de Invamer, el 68% de los colombianos considera que la economía está empeorando, lo que podría beneficiar a candidatos opositores.
- La aprobación de Petro: Con una aprobación que oscila entre el 28% y el 33% según diferentes encuestas, el respaldo del presidente será un activo valioso pero también un posible lastre para el candidato oficialista.
“Las elecciones de 2026 serán, en gran medida, un referendo sobre la gestión de Petro”, concluye Rodríguez. “Pero también una oportunidad para que emerjan nuevos liderazgos capaces de superar la polarización que ha caracterizado la política colombiana en la última década”.
Mientras tanto, los candidatos continúan sus movimientos estratégicos, conscientes de que en un panorama tan fragmentado, pequeños cambios en la intención de voto podrían resultar decisivos para asegurar un lugar en la segunda vuelta.
Fuentes: Análisis de encuestas de Invamer, Guarumo y CNC (abril-mayo 2025), entrevistas con analistas políticos, reportes de La Silla Vacía, El Tiempo y El Colombiano, y datos del Observatorio Electoral de la Universidad Nacional.