A medida que Colombia avanza hacia el ciclo electoral de 2026, el panorama político se presenta como un complejo entramado de aspiraciones individuales, reconfiguraciones de alianzas y un electorado que comienza a sopesar sus opciones en un contexto de importantes desafíos nacionales. Con la primera vuelta presidencial programada para mayo de 2026, los movimientos en el ajedrez político ya son perceptibles, dibujando un escenario de alta competencia y considerable incertidumbre. Este artículo se propone ofrecer una visión informativa y objetiva de la situación actual, explorando los perfiles de los posibles candidatos, las dinámicas de las coaliciones emergentes, los resultados de las encuestas más recientes y los temas cruciales que configuran el debate público en Colombia con miras a las elecciones de 2026.

Precandidatos: Figuras y Propuestas Emergentes

El abanico de posibles aspirantes a la Casa de Nariño es amplio y diverso, reflejando la pluralidad ideológica del país. Desde la derecha hasta la izquierda, pasando por un centro que busca consolidarse, diversas figuras han manifestado, directa o indirectamente, su interés en la contienda o son persistentemente mencionadas en los análisis políticos y sondeos de opinión.

En el espectro de la derecha y el uribismo, la senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, se perfila como una de las voces más firmes. Conocida por su postura en temas de seguridad y su defensa de la propiedad privada, Cabal busca capitalizar el legado del expresidente Álvaro Uribe Vélez. Junto a ella, dentro del mismo partido, suenan otros nombres como los senadores Andrés Guerra, Paola Holguín, Paloma Valencia y Miguel Uribe, este último con una trayectoria que incluye la Secretaría de Gobierno de Bogotá y una activa participación en el Senado. El exvicepresidente Germán Vargas Lleras, figura prominente de Cambio Radical, también es un actor recurrente en las quinielas presidenciales, con un discurso centrado en la seguridad y el desarrollo económico, y se especula sobre una posible precampaña no oficial.

Desde una perspectiva independiente, pero con una clara inclinación crítica hacia el actual gobierno, la periodista Vicky Dávila, exdirectora de la revista Semana, ha expresado su intención de postularse. Su plataforma se enfocaría en la lucha contra la impunidad, la reducción del gasto público y una reforma tributaria, buscando apoyos amplios y sin descartar alianzas.

En el centro político, Sergio Fajardo, exgobernador de Antioquia y excandidato presidencial en dos ocasiones, sigue siendo una figura relevante. Su discurso se ha centrado tradicionalmente en la educación, la transparencia y la lucha contra la corrupción, buscando ofrecer una alternativa a la polarización. La exalcaldesa de Bogotá, Claudia López, también es mencionada con insistencia como una posible candidata de centro o centro-izquierda, avalada por su gestión en la capital y su enfoque en la transparencia. Dentro del Partido Liberal, se mencionan precandidatos como el senador Mauricio Gómez y el exgobernador de Sucre, Héctor Olimpo Espinosa.

Desde la izquierda y el Pacto Histórico, la coalición actualmente en el poder, surgen varios nombres en un contexto de búsqueda de continuidad y posibles reacomodos. Gustavo Bolívar, escritor, guionista y hasta hace poco director del Departamento para la Prosperidad Social en el gobierno de Gustavo Petro, es uno de los mejor posicionados en las encuestas iniciales. Su trayectoria incluye un paso por el Senado y una cercanía ideológica con el actual presidente. La senadora María José Pizarro, vicepresidenta del Senado e hija del excomandante del M-19 Carlos Pizarro, también representa una figura emergente de la izquierda, con un discurso enfocado en la paz y la justicia social. El exalcalde de Medellín, Daniel Quintero, conocido por sus iniciativas tecnológicas pero también por una gestión controvertida, es otra figura de la izquierda que podría buscar la presidencia.

Otros nombres que circulan en el sonajero político incluyen a Juan Manuel Galán, Alejandro Gaviria, Jota Pe Hernández, Juan Daniel Oviedo, Enrique Peñalosa, David Luna, Francisco Barbosa, Eduardo Zapateiro y Miguel Polo Polo, cada uno con distintos niveles de reconocimiento y apoyo potencial.

Posibles Alianzas: Coaliciones en Gesta

La fragmentación del espectro político colombiano hace que la conformación de alianzas y coaliciones sea un factor determinante para el éxito electoral. A más de un año de las elecciones, estas dinámicas están en una fase exploratoria, pero ya se vislumbran algunas tendencias.

Según algunos analistas, el Centro Democrático podría buscar la conformación de una gran coalición de derecha, aglutinando a figuras como Vicky Dávila, Germán Vargas Lleras y otros líderes de partidos afines como Movimiento de Salvación Nacional, Creemos y el Partido Mira. El objetivo sería presentar un frente unido para recuperar el poder ejecutivo.

En la izquierda, el Pacto Histórico enfrenta el desafío de mantener su cohesión y definir un candidato que pueda aglutinar a sus diversas facciones y, al mismo tiempo, atraer a nuevos electores. Las tensiones internas, como las recientemente evidenciadas entre el presidente Petro y Gustavo Bolívar respecto a las aspiraciones presidenciales de este último, sugieren un proceso de definición complejo. La continuidad de las políticas progresistas será un eje central en su discurso.

El centro político, por su parte, sigue buscando una fórmula que le permita superar la fragmentación y presentarse como una opción viable frente a los polos. La capacidad de figuras como Sergio Fajardo o Claudia López para construir puentes y sumar apoyos de diversos sectores será clave para sus aspiraciones.

Es importante subrayar que, en esta etapa temprana, muchas de estas posibles alianzas son especulativas y dependerán de la evolución del panorama político, los resultados de las encuestas y las negociaciones entre los diferentes actores.

El Termómetro Electoral: ¿Qué Dicen las Encuestas Recientes?

Las encuestas de intención de voto realizadas a principios de 2025 ofrecen una primera fotografía del sentir ciudadano, aunque con un alto grado de volatilidad y un considerable porcentaje de indecisos. Firmas como Invamer, Guarumo/EcoAnalítica y el Centro Nacional de Consultoría (CNC) han publicado mediciones que, si bien presentan variaciones, coinciden en algunos puntos clave.

La encuesta de Invamer de marzo de 2025, divulgada por medios como Infobae, Noticias Caracol y Blu Radio, mostraba en un escenario abierto a Gustavo Bolívar (11,8%), Sergio Fajardo (9,5%) y Vicky Dávila (8,3%) en los primeros lugares, seguidos de cerca por Juan Manuel Galán (7,8%), Germán Vargas Lleras (7,3%) y Claudia López (6,8%). En un escenario con una lista reducida de nueve candidatos, Fajardo (16,7%) y Bolívar (16,4%) aparecían en un empate técnico. Esta misma encuesta reveló que un 41% de los consultados definitivamente sí votaría y un 17,6% probablemente lo haría. En cuanto a la identificación ideológica, un 32,3% se ubicó en la derecha, un 25,4% en el centro y un 18,6% en la izquierda, con un 23,6% sin afinidad política definida.

La encuesta de Guarumo/EcoAnalítica de abril de 2025, también situaba a Gustavo Bolívar (12,6%), Vicky Dávila (11,6%) y Sergio Fajardo (11,4%) en las primeras posiciones. Por su parte, la medición del CNC de marzo de 2025 arrojaba a Vicky Dávila (13,6%) y Sergio Fajardo (13,4%) con una ligera ventaja sobre Gustavo Bolívar (10,1%).

Un elemento común en todas las encuestas es la fragmentación del voto: ningún candidato logra, por el momento, consolidar un liderazgo claro y distante. Además, la suma de quienes votarían en blanco, no saben o no responden, o manifiestan no votar por ninguno, representa una porción significativa del electorado, lo que subraya la incertidumbre y el amplio margen para cambios en las preferencias a medida que avance la campaña.

Preocupaciones Ciudadanas y Temas Políticos

El camino hacia 2026 estará marcado por una serie de temas cruciales que ya dominan el debate público y reflejan las principales preocupaciones de los colombianos.

Según la encuesta Invamer de marzo de 2025, el orden público y la seguridad (21,2%) se erigen como la principal inquietud ciudadana. Este tema abarca la crisis de violencia en algunas regiones, el fortalecimiento de grupos armados ilegales y el estado de las negociaciones de “Paz Total” impulsadas por el gobierno actual. Le siguen de cerca el desempleo (19%) y la calidad y cobertura del sistema de salud (19%), dos problemáticas de alto impacto social. La corrupción (13,9%) y la mala gestión del Gobierno y el sistema político (13,1%) continúan siendo preocupaciones relevantes. La economía, incluyendo la inflación y las oportunidades de desarrollo, también es un tema central, aunque no siempre desglosado con un porcentaje específico en todas las encuestas.

En el ámbito estrictamente político, el debate gira en torno a la continuidad o el cambio del modelo de gobierno. La evaluación de las reformas estructurales propuestas por la administración Petro (laboral, pensional, salud) y su impacto a largo plazo será un factor determinante. Las tensiones internas dentro de las coaliciones, especialmente en el Pacto Histórico, y la definición de sus candidaturas también ocuparán un lugar central en la discusión.

Otros temas relevantes incluyen la lucha contra la corrupción y la promoción de la transparencia, el modelo económico y el desarrollo sostenible, el debate ambiental y la utilización de mecanismos de participación ciudadana como las consultas populares, que podrían tener incidencia en el panorama electoral.

Desafíos y Perspectivas Hacia 2026

El panorama político colombiano de cara a las elecciones presidenciales de 2026 se caracteriza por su complejidad y dinamismo. La ausencia de un candidato hegemónico, la reconfiguración de las fuerzas políticas y un electorado con preocupaciones apremiantes configuran un escenario abierto y competitivo.

Los próximos meses serán cruciales para la definición de candidaturas, la consolidación de alianzas y el desarrollo de las propuestas programáticas. Las campañas electorales jugarán un papel fundamental en la movilización del electorado y en la cristalización de las preferencias. La capacidad de los aspirantes para conectar con las preocupaciones ciudadanas, ofrecer soluciones viables a los problemas estructurales del país y construir consensos será determinante.

Colombia se encuentra en una encrucijada donde se debaten visiones distintas sobre el futuro. Las elecciones de 2026 no solo definirán quién ocupará la Casa de Nariño, sino también el rumbo que tomará el país en un periodo de importantes transformaciones y desafíos. La ciudadanía, con su participación informada, tendrá la última palabra en este trascendental proceso democrático.

(Este artículo se basa en información disponible y análisis públicos hasta mediados de mayo de 2025. El escenario político es inherentemente dinámico y está sujeto a cambios.)